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Territorios otomanos

Tierra Cri

Vietnam

Zululandia

Líderes

Corea
Habilidad exclusiva

Tres Reinos

Por cada distrito de Seowon adyacente, las Minas reciben un +1 a Ciencia y las Granjas, un +1 a Alimentos.

Contexto histórico
Luchar ha sido el sino de la península coreana durante mucho tiempo. Numerosas dinastías surgen, caen y resurgen en una masa de tierra del tamaño de Gran Bretaña. La influencia de los imperios extranjeros, tanto colaboradores como beligerantes, proporciona una incertidumbre constante que se cierne sobre el horizonte.

El primer Estado coreano del que se tiene constancia fue Gojoseon, un reino próspero, rico en recursos naturales y con agricultura abundante. Gojoseon lo fundó Dangun Wanggeom, un personaje seguramente apócrifo, en el año 2333 a. C. Según la leyenda, Dangun era hijo del dios Hwangung y una osa muy tenaz y sobrevivió contra todo pronóstico a muchísimas vicisitudes. Al final, Gojoseon se descompuso en una serie de estados en guerra en el 108 a. C.

El surgimiento de una identidad verdaderamente coreana comenzó con los Tres Reinos en el siglo I a. C. El más grande de ellos era Goguryeo, en el norte montañoso. Silla conservó las tierras que bordean la costa este, mientras que Paekche se hizo con el territorio del sudoeste, que rodea el mar Amarillo. Había otros estados más pequeños, como Buyeo o Gaya, pero estos tres reinos eran los que podían consolidar su poder. En el siglo VI, Silla había conquistado muchos de los estados más pequeños, Goguryeo se había ganado una gran reputación en el arte de la guerra (enviando a su famosa caballería contra las fronteras de sus vecinos), mientras que Paekche dio prioridad a la agricultura y las buenas relaciones comerciales con China y Japón.

El afán de Silla por la conquista se acabó por extender a sus vecinos. Aunque era el reino más pequeño, sus alianzas cambiantes lo ayudaron a evitar el destino de otros reinos, como Gaya, enfrentado entre sí a Goguryeo y Paekche. A la postre, la alianza de la reina Seondeok con la dinastía Tang de China (que se detalla en otro lugar) selló el destino de los Tres Reinos. A finales del siglo VII, Silla gobernaba la península coreana a cambio de ceder las tierras más septentrionales a la dinastía Tang. Aunque el confucianismo se extendió bajo el imperio de Silla, fue el budismo el que floreció realmente, y se construyeron muchos templos y monasterios durante este periodo.

Por desgracia para Silla, su sistema tradicional "de clase según hueso" (o "golpum") fue su perdición. Este –similar al concepto de sangre real– era un sistema de castas que determinaba el rango social de una persona en función de la posición que ocupaban sus padres. Pese a que una persona no podía ascender por encima de su clase por nacimiento, sí que podía verse degradada. Aquello representaba una frustración que, en última instancia, conllevó la guerra civil y el declive del reino.

El reino emergente de Goryeo (origen del nombre "Corea") aprovechó la caída de Silla para gobernar Corea desde el 818 d. C. hasta el 1392 d. C. La tecnología vio un aumento exponencial en los tiempos de Goryeo. La impresión con tipos móviles de metal ya existía en Corea casi 200 años antes de la imprenta de Gutenberg e hizo accesibles los textos impresos a las clases bajas coreanas. A pesar de los rápidos avances de Goryeo, esta sufrió una agitación política constante y –peor aún– las invasiones de la dinastía Yuan de Mongolia en el siglo XIII. A lo largo de tres décadas, los coreanos sufrieron seis invasiones mongolas. Al final, la dinastía Goryeo firmó la paz, pero al hacerlo se convirtió en un estado vasallo de los mongoles Yuan de China.

A mediados del siglo XIV, el Imperio mongol era un caos. Goryeo había recuperado casi toda su independencia, a excepción del territorio del norte, conservado por lo que quedaba de la dinastía Yuan. Cuando en 1388 llegó la noticia de que la dinastía china de los Ming pensaba apoderarse de esta tierra, el general Choi Young de Goryeo le ordenó al general Yi Seong-gye que la conquistara de manera preventiva, pese a las objeciones de este. El general Yi condujo de modo formidable a su ejército contra la isla de Wihwa y luego volvió rápidamente para derrocar al general Choi y al rey.

Yi Seong-gye se hizo llamar Taejo, se proclamó rey y creó la dinastía Joseon en 1392. La suerte política de Corea sufrió varios vaivenes a lo largo de los siglos, pero sus logros académicos prosiguieron sin cesar (como el "Hangul" –un alfabeto fonético coreano– y las mejoras de los tipos móviles). El confucianismo sucedió al budismo, la amenaza manchú sucedió a la amenaza de los jurchen y las reformas educativas del Silhak ("aprendizaje práctico") sucedieron a la pedagogía de los neoconfucianos, cada vez más esotérica.

A pesar de los períodos de disturbios, las luchas internas por el poder y las invasiones extranjeras, Corea mantuvo una estabilidad relativa hasta finales del siglo XIX, cuando Japón invadió el territorio coreano para librar guerras contra China y Rusia. La ocupación temporal japonesa se convirtió en una ocupación permanente y, finalmente, en la anexión de la península. Para gran consternación de Corea, siguieron siendo una colonia japonesa desde 1910 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Tras la guerra, el país se dividió en Corea del Norte (comunista) y Corea del Sur (capitalista) en 1948. Los dos países recién formados libraron una guerra en 1950 que vio a China y Rusia aliadas con el Norte y a una coalición de las Naciones Unidas aliada con el Sur. Después de tres años terribles, las dos Coreas acordaron un armisticio (que no una paz) en 1953. A día de hoy, los dos países han permanecido en estado de guerra diferida durante más de medio siglo.
PortraitSquare
icon_civilization_korea

Rasgos

Líderes
icon_leader_seondeok
Seondeok
icon_leader_default
Sejong
Unidades especiales
icon_unit_korean_hwacha
Hwacha
Infraestructura especial
icon_district_seowon
Seowon

Geografía y datos sociales

Ubicación
Asia oriental
Tamaño
Aproximadamente 219 000 kilómetros cuadrados
Población
Aproximadamente 2 000 000 en el s. VIII; 76 497 881 en 2015
Capital
Seúl
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Seondeok
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Sejong
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Hwacha
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Seowon

Geografía y datos sociales

Ubicación
Asia oriental
Tamaño
Aproximadamente 219 000 kilómetros cuadrados
Población
Aproximadamente 2 000 000 en el s. VIII; 76 497 881 en 2015
Capital
Seúl
Habilidad exclusiva

Tres Reinos

Por cada distrito de Seowon adyacente, las Minas reciben un +1 a Ciencia y las Granjas, un +1 a Alimentos.

Contexto histórico
Luchar ha sido el sino de la península coreana durante mucho tiempo. Numerosas dinastías surgen, caen y resurgen en una masa de tierra del tamaño de Gran Bretaña. La influencia de los imperios extranjeros, tanto colaboradores como beligerantes, proporciona una incertidumbre constante que se cierne sobre el horizonte.

El primer Estado coreano del que se tiene constancia fue Gojoseon, un reino próspero, rico en recursos naturales y con agricultura abundante. Gojoseon lo fundó Dangun Wanggeom, un personaje seguramente apócrifo, en el año 2333 a. C. Según la leyenda, Dangun era hijo del dios Hwangung y una osa muy tenaz y sobrevivió contra todo pronóstico a muchísimas vicisitudes. Al final, Gojoseon se descompuso en una serie de estados en guerra en el 108 a. C.

El surgimiento de una identidad verdaderamente coreana comenzó con los Tres Reinos en el siglo I a. C. El más grande de ellos era Goguryeo, en el norte montañoso. Silla conservó las tierras que bordean la costa este, mientras que Paekche se hizo con el territorio del sudoeste, que rodea el mar Amarillo. Había otros estados más pequeños, como Buyeo o Gaya, pero estos tres reinos eran los que podían consolidar su poder. En el siglo VI, Silla había conquistado muchos de los estados más pequeños, Goguryeo se había ganado una gran reputación en el arte de la guerra (enviando a su famosa caballería contra las fronteras de sus vecinos), mientras que Paekche dio prioridad a la agricultura y las buenas relaciones comerciales con China y Japón.

El afán de Silla por la conquista se acabó por extender a sus vecinos. Aunque era el reino más pequeño, sus alianzas cambiantes lo ayudaron a evitar el destino de otros reinos, como Gaya, enfrentado entre sí a Goguryeo y Paekche. A la postre, la alianza de la reina Seondeok con la dinastía Tang de China (que se detalla en otro lugar) selló el destino de los Tres Reinos. A finales del siglo VII, Silla gobernaba la península coreana a cambio de ceder las tierras más septentrionales a la dinastía Tang. Aunque el confucianismo se extendió bajo el imperio de Silla, fue el budismo el que floreció realmente, y se construyeron muchos templos y monasterios durante este periodo.

Por desgracia para Silla, su sistema tradicional "de clase según hueso" (o "golpum") fue su perdición. Este –similar al concepto de sangre real– era un sistema de castas que determinaba el rango social de una persona en función de la posición que ocupaban sus padres. Pese a que una persona no podía ascender por encima de su clase por nacimiento, sí que podía verse degradada. Aquello representaba una frustración que, en última instancia, conllevó la guerra civil y el declive del reino.

El reino emergente de Goryeo (origen del nombre "Corea") aprovechó la caída de Silla para gobernar Corea desde el 818 d. C. hasta el 1392 d. C. La tecnología vio un aumento exponencial en los tiempos de Goryeo. La impresión con tipos móviles de metal ya existía en Corea casi 200 años antes de la imprenta de Gutenberg e hizo accesibles los textos impresos a las clases bajas coreanas. A pesar de los rápidos avances de Goryeo, esta sufrió una agitación política constante y –peor aún– las invasiones de la dinastía Yuan de Mongolia en el siglo XIII. A lo largo de tres décadas, los coreanos sufrieron seis invasiones mongolas. Al final, la dinastía Goryeo firmó la paz, pero al hacerlo se convirtió en un estado vasallo de los mongoles Yuan de China.

A mediados del siglo XIV, el Imperio mongol era un caos. Goryeo había recuperado casi toda su independencia, a excepción del territorio del norte, conservado por lo que quedaba de la dinastía Yuan. Cuando en 1388 llegó la noticia de que la dinastía china de los Ming pensaba apoderarse de esta tierra, el general Choi Young de Goryeo le ordenó al general Yi Seong-gye que la conquistara de manera preventiva, pese a las objeciones de este. El general Yi condujo de modo formidable a su ejército contra la isla de Wihwa y luego volvió rápidamente para derrocar al general Choi y al rey.

Yi Seong-gye se hizo llamar Taejo, se proclamó rey y creó la dinastía Joseon en 1392. La suerte política de Corea sufrió varios vaivenes a lo largo de los siglos, pero sus logros académicos prosiguieron sin cesar (como el "Hangul" –un alfabeto fonético coreano– y las mejoras de los tipos móviles). El confucianismo sucedió al budismo, la amenaza manchú sucedió a la amenaza de los jurchen y las reformas educativas del Silhak ("aprendizaje práctico") sucedieron a la pedagogía de los neoconfucianos, cada vez más esotérica.

A pesar de los períodos de disturbios, las luchas internas por el poder y las invasiones extranjeras, Corea mantuvo una estabilidad relativa hasta finales del siglo XIX, cuando Japón invadió el territorio coreano para librar guerras contra China y Rusia. La ocupación temporal japonesa se convirtió en una ocupación permanente y, finalmente, en la anexión de la península. Para gran consternación de Corea, siguieron siendo una colonia japonesa desde 1910 hasta el final de la Segunda Guerra Mundial. Tras la guerra, el país se dividió en Corea del Norte (comunista) y Corea del Sur (capitalista) en 1948. Los dos países recién formados libraron una guerra en 1950 que vio a China y Rusia aliadas con el Norte y a una coalición de las Naciones Unidas aliada con el Sur. Después de tres años terribles, las dos Coreas acordaron un armisticio (que no una paz) en 1953. A día de hoy, los dos países han permanecido en estado de guerra diferida durante más de medio siglo.
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