Los plátanos, sabrosos y nutritivos, y sus hermanas menos dulces, las bananas, son el fruto de grandes plantas herbáceas con flores que se encuentran en climas tropicales. Los plátanos se cultivaron en un principio en Nueva Guinea y el sureste de Asia, y la historia (en su mayoría, cuentos populares) cuenta que las primeras pruebas de su cultivo humano se encuentran en el yacimiento arqueológico del pantano de Kuk (alrededor del año 5000 a. C.). Con el tiempo, los comerciantes llevaron las plantas a Madagascar, y su cultivo se extendió por África para ser "descubiertas" por los europeos, ávidos de nuevas delicias.