Su bonificación a la Producción se extiende a todos los Centros urbanos que haya en un radio de 6 casillas y que no tengan ya una bonificación por este tipo de edificio.
Contexto histórico
La Revolución Industrial llegó a la civilización y todo lo que antes se hacía a mano comenzó realizarse en fábricas... y en grandes cantidades. Los talleres, en los que los maestros artesanos elaboraban con orgullo productos a mano, dieron paso a las cadenas de montaje y a la producción en masa de artículos estandarizados. La creación del prototipo de fábrica moderna se atribuye al inglés Richard Arkwright. Este patentó en 1769 el "bastidor hidráulico", un dispositivo rotatorio que funcionaba con energía hidráulica, y construyó la factoría de Cromford Mill en Derbyshire. En el proceso sustituyó la mano de obra experta (en ruedas de hilar) por inmigrantes no cualificados, capaces de hilar más rápido a expensas de la calidad del producto. A todos los efectos, Arkwright convirtió a los trabajadores de su planta en un bien sustituible. Otros empresarios no tardaron en copiar su fórmula e implantarla en diversas industrias con la llegada de la máquina de vapor primero y de la electricidad más tarde. En lo que supuso el paso definitivo de la industrialización en el lugar de trabajo, Henry Ford revolucionó la producción en fábricas con la primera cadena de montaje en 1913, capaz de producir un Ford Modelo T a partir de piezas reemplazables en 93 minutos.
Su bonificación a la Producción se extiende a todos los Centros urbanos que haya en un radio de 6 casillas y que no tengan ya una bonificación por este tipo de edificio.
Contexto histórico
La Revolución Industrial llegó a la civilización y todo lo que antes se hacía a mano comenzó realizarse en fábricas... y en grandes cantidades. Los talleres, en los que los maestros artesanos elaboraban con orgullo productos a mano, dieron paso a las cadenas de montaje y a la producción en masa de artículos estandarizados. La creación del prototipo de fábrica moderna se atribuye al inglés Richard Arkwright. Este patentó en 1769 el "bastidor hidráulico", un dispositivo rotatorio que funcionaba con energía hidráulica, y construyó la factoría de Cromford Mill en Derbyshire. En el proceso sustituyó la mano de obra experta (en ruedas de hilar) por inmigrantes no cualificados, capaces de hilar más rápido a expensas de la calidad del producto. A todos los efectos, Arkwright convirtió a los trabajadores de su planta en un bien sustituible. Otros empresarios no tardaron en copiar su fórmula e implantarla en diversas industrias con la llegada de la máquina de vapor primero y de la electricidad más tarde. En lo que supuso el paso definitivo de la industrialización en el lugar de trabajo, Henry Ford revolucionó la producción en fábricas con la primera cadena de montaje en 1913, capaz de producir un Ford Modelo T a partir de piezas reemplazables en 93 minutos.