Las fuentes de agua renovables otorgan +6 de Energía a la ciudad.

Una central hidroeléctrica emplea agua en movimiento para girar turbinas conectadas a dinamos y, de ese modo, generar electricidad. Cuanto más rápido se mueva el agua por la central, más rápido girarán las dinamos y más electricidad se producirá. Por consiguiente, estas centrales se suelen construir en presas que pueden aprovechar la diferencia de altura entre el nivel del agua en la toma y en la descarga para aumentar la velocidad de la turbina. Las centrales hidroeléctricas, a diferencia de las de combustibles fósiles, producen menos emisiones y desechos, y convierten la energía en electricidad de un modo mucho más eficiente.

Sin embargo, traen consigo problemas para el medioambiente. Al construir una presa en un río se cambia drásticamente su ecología, por lo que los proyectos hidroeléctricos a gran escala alteran la cultura y la historia de los pueblos que la rodean. La Autoridad del Valle del Tennessee, por ejemplo, provocó el desplazamiento de miles de comunidades pequeñas, y la presa de las Tres Gargantas destruyó emplazamientos arqueológicos y culturales.